Esta imagen ya no se va a repetir más. Porque los guionistas vuelven al tajo. ¿Por qué? Porque a todo el mundo le entró el pánico cuando se suspendió la gala de los Globos de Oro y más de uno ha estado al borde del infarto al pensar que podría ocurrir lo mismo con los Oscar. ¡Con los Oscar! Sacrilegio. Así que todos se han puesto las pilas para solucionar el asunto. Ya no valía eso de "¿No es tan gracioso el presentador de los Oscar? Pues que se escriba los chistes él mismo".
Por lo visto, el acuerdo al que han llegado es un nuevo contrato que regulará el trabajo de los guionistas durante los próximos tres años y que incluye el pago de 1.200 dólares por cada programa emitido por Internet durante los dos primeros años de reposiciones y un 3% de los beneficios a partir del tercer año. Para los programas que no incluyan publicidad, los pagos se quedarán en 1,2%, igual que los alquileres online.
Parece ser que como los guionistas han conseguido esto, ahora los actores se han puesto celosos y quieren conseguir lo mismo. ¿Huelga de actores en marcha? ¿Alguien se imagina a Nicole Kidman pateándose las calles con un cartel que diga "Actors on strike"? Se verá.
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